A pesar de la lluvia, Seattle es una ciudad cautivadora para disfrutar en una autocaravana. Como destino turístico es un poco estrafalario, pero con su silueta enmarcada por la imagen de las Olympic Mountains es también uno de los más bellos.
Apodada Ciudad Esmeralda y ubicada a tan solo 100 kilómetros al sur de Vancouver y la frontera canadiense, la ciudad tiene matices de hojas perennes y está flanqueada por vistas incomparables de las cadenas montañosas. Salir de la ciudad es parte de Seattle, tal como lo es la arquitectura. Es una metrópolis cosmopolita con un floreciente ambiente artístico, despampanantes restaurantes y hoteles boutique. Quizás es una nueva fachada que está probando la ciudad, pero parece que le queda bien.
Puede ser una buena idea alquilar una autocaravana y comenzar un viaje por carretera en la costa oeste hacia Los Ángeles, deteniéndose en Portland y San Francisco a lo largo de la ruta.
Un entorno único
Las Cascade Mountains se encuentran al este, mientras que las escarpadas Olympic Mountains se elevan en el oeste. Los extensos parques y gigantescos bosques hacen de Seattle una de las ciudades más bellas del noroeste.
En contraste, el centro de Seattle es compacto y fácil para recorrer a pie, en lugar de tener que lidiar con el tráfico. Las colinas son particularmente empinadas, así que prepárese para usar el embrague si conduce un vehículo de transmisión manual. Seattle está ubicada en una maraña de líneas de falla que corren como ríos en la corteza terrestre, por lo que los terremotos son cosa común.
Needle, mercado y recorridos
La Space Needle, o Aguja Espacial, se eleva en las alturas en el Parque Central de Seattle, el sitio donde se llevó a cabo la Feria Mundial de 1962. Tome el ascensor para subir los 184 metros y admirar la ciudad entera desde el observatorio de cristal de 360 grados. Podrá alcanzar a ver el Monte Rainer a 54 kilómetros de distancia. No puede visitar Seattle sin vivir la experiencia del Pike Place Market. Este es un destino turístico bien trillado, pero por una buena razón. Los pescaderos muestran su arte con una coreografía en la que se lanzan salmones unos a los otros, mientras que los talentosos cocineros convierten al pescado en exquisitas cenas.
El parque Olympic Sculpture Park es una manera atractiva de pasar la tarde. La entrada es gratuita y está abierto todos los días del año, y allí podrá apreciar exposiciones y esculturas tanto permanentes como temporales. Viaje debajo de la superficie con el recorrido de Bill Speidel’s Underground Tour. Este recorrido inicia en la Doc Maynard’s Public House, serpentea a través de tres cuadras de pasadizos que en otra época fueron las calles de Seattle. Disfrute de un café mientras ve pasar a la gente en Ballard Avenue un domingo por la mañana y sumérjase en el ambiente del bullicioso mercado de fin de semana.
Ponerse cómodo para pasar la noche
El Parque Estatal Seaquest está localizado cerca del Monte Santa Helena y ofrece el escape perfecto gracias a sus espectaculares vistas del altísimo volcán y la costa. El Parque Estatal Lake Sylvia es un hermoso campamento rústico a menos de dos horas de la ciudad de Seattle, mientras que Vasa Park Resort está a solo corta distancia del centro; este es un campamento familiar con excelente piscina y socorristas atentos.
Trailer's Inn RV Park está localizado en la intersección de Eastgate y la I-90; aunque está cerca, de todas formas hace falta caminar una buena distancia para tomar transporte público que lo lleve a la ciudad. Si prefiere un acceso más fácil a los autobuses de la ciudad, pruebe en el Campamento KOA al este del aeropuerto. En caso de querer pasear en Seattle solo por una ocasión, puede utilizar el estacionamiento del Zoológico por $15.75 al día. Estaciónese y tome el autobús hacia Seattle, ubicada a solo ocho kilómetros de distancia. También encontrará estacionamiento cerca del Marriott Hotel LK Union.
Menú variado en los restaurantes de Seattle
Seattle es un paraíso para los amantes de la buena comida, donde los talentosos chefs exhiben los increíbles mariscos norte-occidentales y los productos locales. Los lugares preferidos tienen ese equilibro de carácter y ambiente poco convencional, junto a suntuosas comidas. Pruebe The Walrus and the Carpenter, Wild Ginger, Sitka & Spruce and Lark. Y si busca algo más hogareño… Ivan’s Salmon House. Del lado opuesto al Starbucks original, Lowell’s Restaurant ofrece impresionantes vistas del agua y un menú tentador para el desayuno y el almuerzo.
Si busca comer a buen precio, ha venido al lugar correcto. Seattle está abarrotada delicias frugales para los amantes de la buena cocina. Corazon Taqueria cuenta con los mejores burritos urbanos por solo un poco más de $5; en Capitol Hill puede encontrar comida malaya en Kedai Makan por menos de cinco dólares, y en La Bodega puede deleitarse con una exquisita empanada por solo tres dólares. Las food trucks recorren la ciudad con platillos deliciosos. My Sweet lil’ Cakes vende gofres en un palito, rellenos con ingredientes como manzana verde, caramelo y nuez pecan. Summer Dog es claramente una categoría aparte, pues preparan sus hot dogs ¡en un pequeño barco!
Senderismo en algún lugar... en cualquier lugar
- Monte Rainer es la opción perfecta para un viaje corto: trepará sobre los glaciares en el verano y un guía lo llevará a un paseo con raquetas para nieve en el invierno. Además, la estación de deportes de invierno está a muy corta distancia.
- Es fácil planear un paseo por los senderos en las Cascade Mountains. Cuentan con las vistas más impresionantes en todo el estado y no son demasiado extenuantes para los niños.
- Green Lake es uno de los parques más queridos de Seattle. Es un sendero fácil para principiantes y la ruta hace un trayecto de casi cinco kilómetros alrededor del lado.
- El Parque Nacional Cougar Mountain ofrece una variedad de rutas para diferentes niveles de aptitud.
- Snoqualmie Falls. A tan solo 45 minutos de la ciudad, estas cascadas tienen una caída de 82 metros y son en verdad sorprendentes.
- Easy Pass (Paso Fácil) tiene un nombre engañoso. A pesar de ser un poco difícil, esta caminata le ofrecerá algunas de las vistas alpinas más impresionantes de las Cascadas del Norte y de Ragged Ridge.
- Harry’s Ridge es una ruta obligada: consiste en un trayecto de más de 12 kilómetros en viaje redondo hasta la parte superior del volcán en donde el Monte Santa Helena hizo erupción en 1980.
¿Le interesa la vida salvaje? Entonces estacione su autocaravana y diríjase hasta el Parque Nacional Olympic − un santuario en donde el wapití de Roosevelt corre libremente en el bosque. En el ParqueNorthwest Trek puede encontrar más de 200 tipos de animales. Cubre una superficie de 290 hectáreas, y ofrece también senderos naturales y recorridos en tranvía para ayudarle a avistar la fauna. No olvide visitar Wolf Haven, un santuario para lobos.
La gente de Seattle
La primera impresión de Seattle puede ser algo fría. La gente es reservada y conservadora, pero solo se necesita tomar una ronda con los habitantes locales para que estos bajen la guardia. Es una ciudad de expatriados y del estereotipo de ingenieros de software. De hecho, muy pocas personas que viven en Seattle crecieron en realidad ahí. Seattle es la ciudad más alfabetizada en los Estados Unidosy la cuarta más segura.
Una ciudad de contrastes
Con nueve meses de lluvia y más de 200 días nublados al año, es de maravillarse que Seattle disfrute de tal auge en el turismo. Los residentes no usan paraguas así que, a menos que quiera anunciar que es turista ¡enfréntese al clima con una capucha! La época más popular para visitar va de mayo a octubre, con el clima perfecto de verano durante todo septiembre. Las fuertes lluvias y las bajas temperaturas significan que los hoteles son más baratos en el invierno − la temporada perfecta para practicar snowboard, esquiar y realizar senderismo en la nieve en el Monte Rainer.
