De Auckland a Nelson: Velas, azufre y vino de clase mundial

Desde hace tiempo que este secreto fue develado: Nueva Zelanda es uno de los destinos de viaje principales en el mundo gracias a sus magníficas vistas, un medio ambiente cuidado con mucho amor, el encanto de los pueblos pequeños y sus amigables habitantes locales. Ya que existen tantas cosas diferentes por hacer y muchas rutas por tomar, aquellos que conocen bien Nueva Zelanda a menudo escogen la opción de una camioneta camper de alquiler para recorrer el país, ya que esto les ofrece lo máximo en libertad de sus viajes por carretera. Coordinar una autocaravana de alquiler en Nueva Zelanda desde Auckland es especialmente fácil: esta es la ciudad más grande del país, así que la selección disponible está entre las mejores. Sin embargo, antes de que se apresure a recorrer el sur del país, existen algunos puntos importantes que usted va a querer visitar en la Ciudad de las Velas.
 

Auckland

Ubicada a lo largo de un amplio istmo en la mitad superior de la Isla Norte, Auckland nunca se aleja demasiado de la costa. La vibra costera está permeada en la ciudad, lo que le da un aire relajado y fresco a la región y ejerce su influencia sobre todas las cosas, desde la cocina hasta la diversión. A pesar de ser la ciudad más poblada de Nueva Zelanda, esta no es la mega metrópolis que usted se imagina. Con menos de 1.5 millones de habitantes, sería una exageración el etiquetarla como "La Gran Ciudad", pero de todas formas tiene una población más que suficiente para brindar una fantástica selección de atracciones y actividades para los visitantes curiosos.
 
Uno de los mejores lugares para sentir al máximo el ambiente de Auckland es el Viaducto, un área en la ribera, ubicada entre el distrito central de negocios y el Puerto de Auckland. Transformado a finales de los 90 de ser un puerto comercial en decadencia a un centro urbano cosmopolita con espacios elegantes para oficinas, apartamentos lujosos y restaurantes de comida gourmet, el Viaducto también alberga una hermosa marina, lo que da origen el apodo actual de Auckland: La Ciudad de las Velas. Este es en definitiva el lugar al cual acudir si se está en la búsqueda de restaurantes de clase mundial o emocionante vida nocturna. Incluso si no busca restaurantes, un paseo por la zona costera en un día soleado bien vale la pena su tiempo.
 
Aquellos en búsqueda de comida y bebida gourmet en un ambiente menos urbano harán bien en dirigirse al oeste: el clima soleado y templado de Auckland se presta bien para la fabricación de vinos y existe un buen número de bodegas en el lado occidental de la ciudad. Usualmente están un poco escondidos, pero existe un gran número de recorridos de vino de los cuales puede escoger y que le guiarán a través de las mejores ofertas.
 
Si se muere de ganas por estar en medio de las ricas maravillas de los bosques de Nueva Zelanda, tan solo diríjase un poco más al oeste, hasta las Waitakere ranges, o cordilleras de Waitakere. Existe una amplia gama de rutas de senderismo disponibles, desde aquellas que usted puede completar en menos de una hora, hasta las caminatas de varios días a través de bosques nativos, cruzando pantanos y a lo largo de costas aisladas. 
 
Los que viajan con niños descubrirán también que la ciudad tiene más que suficiente para mantenerlos entretenidos. Rainbow's End, el principal parque de atracciones de Nueva Zelanda, ofrece emociones escalofriantes para los niños mayores y aventuras más sutiles para los pequeñitos. Se encuentra abierto todos los días excepto Navidad, por lo que usted no tendrá que preocuparse por encontrarle un espacio en su programa. El Zoológico de Auckland es siempre un favorito: el Centro de Descubrimiento y Aprendizaje del Zoológico ayuda a enseñar a los niños acerca del medio ambiente y el reino animal. Para aquellos que busquen aprender un poco más acerca de la historia de Nueva Zelanda en un ambiente divertido y entretenido, el Museo de Auckland es una selección grandiosa. Y si se encuentra a la caza de algo un poco fuera de lo ordinario, considere un viaje en ferry cruzando hasta la Isla Rangitoto para un recorrido de explorador volcánico Rangitoto. Las vistas son inmejorables y los guardaparques le llevarán a través de los bosques nativos y a través de ásperos afloramientos de lava que cuentan la turbulenta historia de la región.
 
Es cierto que no hay una escasez de cosas por hacer en Auckland pero, a pesar de todo lo que la ciudad tiene por ofrecer, eventualmente será hora de subirse a su autocaravana y tomar el rumbo al sur.
 

Al sur de los Bombays

La primera parte de su jornada deberá pasarse rápidamente, aunque quizás deba tener cuidado respecto a la hora de su partida. El tráfico en la autopista sur de Auckland puede darle un poco de dolor de cabeza alrededor de la hora pico, pero no debería tener inconvenientes si la toma antes de las 3 pm o después de las 7 pm. Diríjase directo hacia Bombay Hills antes de tomar la salida Coromandel Peninsula / Tauranga que lo lleva directo a la Nueva Zelanda rural. La hora siguiente es la oportunidad perfecta para comenzar a tocar sus canciones favoritas para el viaje en carretera y empaparse de la serenidad de la campiña neozelandesa. Suaves y ondulantes colinas y verdes campos se extienden tan lejos como llega la vista: no debe sorprenderse cuando se encuentre en el pueblo que se ha vuelto famoso en todo el mundo por ser la patria de los Hobbits: Matamata.
 

Matamata

Por supuesto, hay mucho más en Matamata que solo Hobbiton, pero es difícil negar que es la atracción principal para muchos. Mucho más que unas cuantas armazones de edificios, el estudio cinematográfico de Hobbiton (completo con un amplio paisajismo) se ha dejado intacto y en condiciones grandiosas: para los fanáticos de El Señor de los Anillos o El Hobbit, el recorrido a los estudios cinematográficos es una visita obligada. Si no le entusiasman mucho las criaturas fantásticas, las aguas termales de Opal (Opal Hot Springs) podría ser el lugar para usted. Libérese de las millas viajadas con un baño en las burbujeantes piscinas azules de aguas termales: incluso podría decidir hospedarse, ya que las aguas termales tienen su propio parque vacacional adjunto. ¿Se siente un poco hambriento? La Kaimai Cheese Company tienta a sus visitantes con encantadoras delicias lácteas: hay más que solo queso en su oferta, pero podría olvidarse de todo lo demás en cuanto hinque el diente en un sedoso brie o en un azul de fuerte olor.
 
Si tuviese que tomar la ruta más directa hacia Nelson, usted tomaría la carretera al sur del pueblo pero ¿qué tiene de divertido el dirigirse en línea recta hacia su destino? Diríjase en cambio hacia el este y tras una hora de conducir llegará a uno de los mejores lugares turísticos en todo el país...

Se requiere de mucho esfuerzo para que una ciudad destaque como un destino turístico excepcional en este país que recibe a los turistas con los brazos abiertos, pero Rotorua lo ha logrado. Y a pesar de que Taupo no cuenta con tanto atractivo como su vecino del norte, es cierto que tiene su propio encanto escénico con muchas cosas por hacer para los adictos a la adrenalina y para los buscadores de aventuras por igual.
 

Rotorua

En cuanto sienta un olor a azufre, se dará cuenta que Rotorua está cerca. El olor distintivo (que dejará de percibir tras un corto tiempo en la ciudad) se debe a la extensa actividad geotérmica: la tierra que rodea a Rotorua es abundante en lodo burbujeante, géiseres y nubes gigantes de vapor que se elevan desde la tierra. Es increíble observar esta tierra sin descanso: en algunos lugares se siente como si se hubiese transportado a otro planeta, o de vuelta a los días de la formación de la Tierra muchas eras atrás. Para la mayoría, esto será lo primero que quieran ver: para un encuentro personal y cercano con estas rebeldes fuerzas de la naturaleza, Hell's Gate y Whakarewarewa son lugares grandiosos en dónde comenzar. Toda vez que estos son lugares fantásticos en los cuales contemplar la fuerza bruta de la Tierra, las piscinas de lodo y flujos azufrosos distan mucho de ser su única oferta. Consiéntase con un lujoso tratamiento de spa en Hell's Gate: desde baños en lodo hasta masajes, este es un lugar que aprovecha lo que la naturaleza le brinda y se basa en ello para ofrecer experiencias indulgentes y tonificantes. Whakarewarewa, por otra parte, brinda a los turistas una experiencia de tipo muy diferente. La tribu Tuhourangi / Ngati Wahiao ha recibido a los visitantes en sus tierras por más de 200 años, permitiéndoles ser testigos de primera mano de su cultura maorí. Presencie las actuaciones culturales y escuche las canciones que cuentan los mitos y leyendas antiguas, vea cómo se crea una comida hangi, pruebe los sabores de la tierra y tome un recorrido guiado a una aldea tradicional maorí (o marae).
 
Una vez que tenga suficiente de los vapores y el azufre, le espera el resto de Rotorua. A tan solo unos minutos de la ciudad está Skyline Rotorua, uno de los mejores lugares en todo el país para pasar unas horas llenas de diversión. Los visitantes al Skyline se deslizan cuesta arriba del Monte Ngongotaha en una góndola jalada por cables (no olvide mirar hacia atrás para obtener una vista extendida de la ciudad y el lago), pero llegar a la cima es tan solo el comienzo. Hay un poco de todo para todos en este destino único de montaña. Si ha llegado alrededor de la hora del almuerzo, tome algo para comer en la Food Market Kitchen con un estilo de mercado, antes de dirigirse a la bodega de Volcanic Hills para degustar una o dos de las cosechas locales. Para inyectarle algo de emoción a su día, pruebe el Rotorua Luge. Es un híbrido de tobogán y go-kart que lo enviará a toda velocidad por un costado de la montaña: rete a sus amigos o familia en una carrera al fondo y descubra quién de ustedes es el atrevido. Si esto parece muy escalofriante, también existen relajantes rutas escénicas que le permiten atravesar suavemente los exuberantes alrededores boscosos. Si tiene niños, no se pueden perder la tienda y galería Jelly Belly. Se trata de una verdadera experiencia única, con más de 100 sabores diferentes, seductoras actividades centradas en las gominolas y meticulosas obras de arte hechas con gominolas.
 
Esto tan solo ha rozado la superficie de todas las cosas que puede hacer en Rotorua: ni siquiera hemos mencionado todavía el Agrodome, hogar de un espectáculo en verdad popular (¡e interactivo!) que demuestra algunos de los atractivos principales de la vida de granja en Nueva Zelanda, o el encumbrado bosque Redwood, que atrae tanto a visitantes diurnos como a los ciclistas de montaña para pasar a través de los gigantes. Hay demasiado que ver y hacer aquí en una mañana o incluso durante varios días, así que escoja sabiamente sus actividades y después tome otra vez la carretera, sabiendo que hay más maravillas adelante de usted.
 

Taupo

A tan solo una hora de camino desde Rotorua se encuentra otro pueblo a orillas del lago, incluso más impresionante que el último. Quizás no tenga mucho tiempo para pasar en Taupo, dependiendo de lo que haya escogido hacer en Rotorua, pero lo mejor de contar con una autocaravana de alquiler en Nueva Zelanda es el hecho de que usted puede adaptar sus planes a medida que avanza: tan solo porque el itinerario dice ‘Día 2: Rotorua a Turangi’, no quiere decir que tenga que hacer exactamente eso. ¡Tiene la libertad de viajar a donde desee!
 
Si de hecho decide pasar un poco de su tiempo en Taupo, ciertamente no se aburrirá. El pueblo es un tipo de centro para la aventura y cuenta tanto con paracaidismo y puentismo. A pesar de que existen muchos lugares que le permiten arrojarse desde aviones y plataformas (con sus medidas de seguridad apropiadas, por supuesto) Taupo es uno de los lugares más escénicos en el país en los que puede hacerlo. El paracaidismo le permitirá tener tiempo suficiente para apreciar el espléndido paisaje desde las alturas, mientras que el puentismo le permite caminar en una plataforma voladiza que se extiende sobre un río de profundas aguas azules antes de sumergirse en la garganta. Incluso puede pedir un poco más de longitud ¡para que se moje en el río al fondo! Las pistas de esquí de Mont Ruapehu se encuentran cerca de ahí, y Whakapapa es una opción popular entre los esquiadores casuales y también para los aficionados a la nieve. Por otro lado, Taupo DeBretts es una buena opción si lo único que busca es relajarse y aflojar esos músculos tensos por el volante. Ya sea que opte por un simple baño en sus piscinas termales, un tratamiento de spa o una estancia por la noche, DeBretts seguramente lo dejará revitalizado y listo para la siguiente etapa en su jornada. No obstante, si está tan solo de paso por el pueblo, una excursión corta a lo largo del litoral del Lago Taupo le despejará con rapidez cualquier telaraña mental y lo dejará inspirado para el tramo final.
 
Desde Taupo hay tan solo 45 minutos de viaje a lo largo del litoral del lago para llegar al destino final del día: Turangi.

Si tiene tiempo libre, no se apresure a salir por el sur de Turangi. Es una campiña increíble y existen amplias oportunidades para explorar el paisaje ya sea que se trate de un aventurero entusiasta o solo un amante casual de la naturaleza que busca una muestra de lo que los alrededores campestres tienen para ofrecer.
 

Turangi

Con el trayecto de viaje más largo a sus espaldas (más de 4 horas), quizás quiera salir cuanto antes de Turangi. Pero si cuenta con tiempo, hay muchas cosas por hacer en el área de Turangi. Para comenzar, es la puerta de entrada al Tongariro Alpine Crossing, una ruta que lleva a los senderistas justo al escenario alpino más espectacular en toda la Isla Norte. Los fanáticos de El Señor de los Anillos podrán reconocer la silueta del Monte Doom en las cuestas suaves del Monte Ngauruhoe, pero sea o no un aficionado de la Tierra Media, este lugar de formaciones rocosas fuera de este mundo, picos elevados y barrancos escarpados seguramente lo llenará con una sensación de lo fantástico. Para una aventura familiar única, intente hacer un descenso de río aguas abajo en el Lower Tongariro. Este está dirigido específicamente a los niños y a aquellos que se inician en el rafting, ¡así que no tenga miedo de intentarlo!
 

El camino a Wellington

Al dejar atrás a Turangi, es hora de tomar la Desert Road, o Carretera del Desierto. Aunque el nombre pueda traer a la mente imágenes de un sol candente y de dunas de arena acumulada, la realidad es un poco diferente. Este largo tramo directo de carretera entre Turangi y Waiouru está caracterizado por planicies barridas por el viento y hierba baja y dura. Mucha del área circundante es utilizada por el ejército de Nueva Zelanda para ejercicios de entrenamiento, así que se recomienda a los viajeros que no se aparten del camino.
 
Al final de la Carretera del Desierto se encontrará con Waiouru, un pueblo que existe más que todo por la proximidad de la base del ejército. Tiene un buen museo militar, al que vale la pena echar un vistazo especialmente si tiene a pequeños que necesiten estirar las piernas.
 
A más o menos 20 minutos desde Waiouru usted pasará por Taihape, la auto denominada "Capital Mundial de las Botas de Lluvia". Créalo o no, cada año atrae a grandes grupos de personas para la competencia anual de lanzamiento de botas de lluvia.
 
Si cree que Taihape tiene un tema estrafalario, espere a que llegue a Bulls (o Toros), a una hora de camino de ahí. Busque los enormes toros negros sobre ruedas. Vale la pena tomar un descanso aquí, aunque sea para aguantarse la risa con los juegos de palabras que hay por todos lados. Tan solo por dar un ejemplo: la tienda de helados es un "lame un toro", la tienda de vegetales es una "vegeta-toro" y la estación de policía, una "poli-toro". Hasta la iglesia local entra en este juego, etiquetándose a si misma como "perdona-toro". Por supuesto, los juegos de palabras relacionados con los bovinos pueden verse en un solo día, por lo que eventualmente usted continuará de nuevo hacia el sur.
 

Costa Kapiti

A una hora a las afueras de Bulls llegará a la costa Kapiti, una de las líneas costeras protegidas con más celo en todo el país. Esta sección norteña de la región de Wellington es renombrada por su biodiversidad y su belleza natural: Peter Jackson la utilizó en las locaciones tanto de King Kong como de la tercera parte de El Señor de los Anillos; sin importar si es un fanático o no de las películas, los deleites escénicos de Kapiti quizás lo hagan imaginar bestias míticas y fortalezas altísimas al doblar la esquina. La carretera se ubica un poco alejada al mar, pero si quiere un acercamiento a las vistas costeras que han hecho de esta área una leyenda local, la playa Waikanae es el lugar al que debe ir. Esta no es una playa turística abarrotada, sino una hermosa sección salvaje de la Reserva Marina Kapiti en donde pueden avistarse a las ballenas y los delfines de Héctor durante su migración. Para aquellos más interesados en las maravillas creadas por el hombre que en aquellas que ofrece la naturaleza, a tan solo unos minutos se encuentra Paraparaumu, un pueblo por el cual podría desear pasar sin detenerse a no ser por su impresionante museo del automóvil. Vehículos blindados propiedad de los gángsters, coches que transportaron a la Reina Isabel II, e incluso uno adquirido por Adolfo Hitler. La gama de vehículos en exhibición es sorprendente y bien vale la pena ser vista por cualquiera que está interesado aunque sea un poco en los vehículos automotor.
 
Es hora de tomar las últimas dos horas de viaje a lo largo de la costa oeste para después adentrarnos a la ciudad de Wellington.

Aunque Auckland es la ciudad más grande de Nueva Zelanda, Wellington es el corazón que late en la nación. Sí, es la ciudad capital, pero hay mucho más que eso. Es también un centro cultural próspero, lleno de galerías de arte, teatros magníficos, una increíble y diversa gama de clubes nocturnos y bares, así como restaurantes con platillos para morirse. Usted podría pasar una semana en Wellington y no lograr siquiera rascar la superficie de lo que esta metrópolis tiene para ofrecer.
 

Wellington

El Museo de Nueva Zelanda, o Te Papa Tongarewa (o Te Papa, como se le conoce normalmente) es la primer visita obligada para muchos visitantes en Wellington. Abarcando el papel tanto de un museo tradicional como de un espacio de exhibición cultural multifacético, Te Papa es el lugar al cual acudir si en realidad quiere conocer aquello que hace moverse a Nueva Zelanda.
 
Por otro lado, si desea experimentar de primera mano la vida nocturna de la cual todos hablan, quizás quiera dirigirse a Courtenay Place o Cuba Street en el centro de Wellington. El club o bar que escoja dependerá de su estado de ánimo y gustos, pero lo mejor es visitar varios sitios a lo largo de la noche ya que cada uno de ellos será muy diferente al otro respecto a la atmósfera y el tema. The Library en Courtenay Place es un bar lounge sencillo: como es de esperarse, los muros están cubiertos con libros los cuales usted puede leer mientras toma un cóctel o una cerveza artesanal. El ambiente del Good Luck Bar en Cuba Street se remonta a su pasado como Opium Den, con una lámpara flotante en barra que divide el lounge de la pista de baile y la música alternativa, lo que le da al lugar una vibra única, como de sueños. Alice le rinde tributo al exquisitamente estrafalario Alicia en el País de las Maravillas de Lewis Carrol, al tiempo que Sandwiches en la esquina de Kent Terrace y Majoribanks Street es el centro del drum and bass, de los clubes y de la música electrónica de Wellington. No es necesario decir que hay muchos otros centros nocturnos que usted puede disfrutar y que sería imposible describirlos aquí, por lo que solo necesita salir y explorar por si mismo: incluso, si conoce a un habitante local, permita que le guíe a los lugares que mejor se ajusten a usted.
 
Aquellos en búsqueda de algo un poco más sencillo podrán intentar el teleférico de Wellington. Esta muy popular atracción va desde el centro de la ciudad de Wellington hasta el pintoresco suburbio de Kelburn, desde donde se encontrará a una corta distancia a pie para llegar al Jardín Botánico de Wellington y el Museo de la Ciencia en el Observatorio Carter. Los senderos serpenteantes de las colinas en el Jardín Botánico son el lugar perfecto para alejarse del bullicio y la agitación de la ciudad y para pasar un poco de tiempo a un ritmo más tranquilo. Con un bosque nativo, un gran invernadero estilo victoriano y un renombrado Jardín de Rosas, se sentirá cómodo muy pronto en la serenidad de sus alrededores. Si viene durante los meses de primavera o verano, quizás tenga suerte de encontrarse con un concierto gratuito.
 
Los fanáticos de la magia de las películas probablemente saben que Wellington se ha convertido en un centro principal para la filmación, gracias a los esfuerzos de Peter Jackson y un puñado de otros, y si desea echar un vistazo al detrás de las cámaras de su hechicería cinematográfica ¡puede hacerlo! El recorrido a los Talleres de Weta Cave le presentará utilería y modelos que quizás le parezcan muy familiares, así como darle a conocer lo que pasa fuera de cámaras para crear esos increíbles momentos en las películas.
 
¿Listo para seguir adelante? La siguiente etapa en su viaje será un poco diferente. Para llegar desde Wellington hasta Blenheim, primero tendrá que tomar el Ferry Interislander, cruzar el Estrecho de Cook y navegar a través de las aguas tranquilas de los Marlborough Sounds. No es ningún problema llevar a bordo su camioneta camper: al llegar a la terminal del ferry encontrará los señalamientos que le indicarán exactamente a dónde dirigirse. El viaje toma cerca de tres horas y es descrito como uno de los viajes en ferry más hermosos del mundo. Si siente hambre, hay mucha comida y bebida a bordo, pero probablemente preferirá pasar la mayor parte de su tiempo en el exterior, justo en la cubierta de observación, especialmente una vez que el ferry llegue al estrecho. Recuerde llevar consigo una chamarra ya que el viento puede resultar un poco frío. El Interislander lo llevará sano y salvo hasta el pintoresco pueblito de Picton en la Isla Sur. No hay mucho en este lindo pueblo costero, pero es un muy buen lugar para detenerse a almorzar. La comida de mar recién capturada y vino Marlborough de clase mundial son una combinación sublime... A menos de media hora al sur de Picton encontrará a Blenheim, su parada final de este día.

La Isla Sur de Nueva Zelanda está llena de increíbles sitios y experiencias, pero si tiene el tiempo justo para disfrutar brevemente de las maravillas de este lugar, entonces Blenheim y Nelson son muy buenos lugares para comenzar. Renombrados por sus veranos gloriosos, su vino excelente y los senderos para excursionar que rivalizan con los mejores del mundo, usted está listo para deleitar sus sentidos al final de su viaje.
 

Blenheim

Esta es una de las ciudades más grandes de la región de Marlborough (aunque, con una población apenas superior a los 30,000, llamarla ciudad grande sería una exageración seria) y es ampliamente conocida como uno de los lugares más soleados de Nueva Zelanda. Los calientes veranos son uno de los factores que han ayudado a hacer de Marlborough la región vinícola más aclamada del país. Las cosechas de sauvignon blanc de Marlborough han deslumbrado a los críticos de vinos en todo el mundo, con su sabor explosivo y su consistente calidad excelente. Blenheim es el mejor lugar para probar los vinos de los que habla todo mundo. Hay toda una gama de opciones de recorridos vinícolas, incluyendo un recorrido en bicicleta auto guiado completo con transporte desde y hacia Blenheim. Tenga en mente que si planea degustar el fruto del vino, deberá eliminar de su menú la posibilidad de conducir de inmediato de vuelta a Nelson.
 
Para aquellos que prefieran salir y descubrir lo que tiene para ellos la naturaleza de la región de Marlborough, la Molesworth Tour Company ofrece un recorrido en todo terreno a través de las tierras altas de Marlborough. Al brindar a los visitantes una probadita muy difícil de encontrar sobre lo que es la vida en las remotas comunidades rurales de Nueva Zelanda, esta es una aventura que no olvidará. Pero, aunque la región de Marlborough es gloriosa, Nelson nos espera.
 
Si está buscando un lugar en donde dividir el viaje (lo que lleva un poco menos de dos horas si lo hace de forma directa) Havelock no es una mala opción. Este pueblo costero a la cabeza de Pelorus Sound es famoso por sus mejillones verdes, por lo que no es de sorprender que el lugar más popular para comer sea The Mussel Pot. Este pequeño restaurante y café poco convencional ofrece platillos fabulosos: los mejillones son la especialidad, por supuesto, pero tienen muchas otras opciones para aquellos que no son muy adeptos a los crustáceos.  Una vez que deje atrás los mejillones de Havelock, estará a tan solo una hora de distancia de su próximo destino.
 

Nelson

De Nelson se puede decir que está entre los lugares vacacionales más grandiosos en Nueva Zelanda. El clima es excelente, las bodegas numerosas (y casi tan bien apreciadas como las de Marlborough) y la ciudad sirve como una puerta de entrada a algunas de las playas y rutas de senderismo más hermosos en el mundo.
 
Para sumergirse realmente en lo mejor de la región de Nelson, considere partir al recorrido costero de Abel Tasman. El recorrido completo se extiende por 51 kilómetros dentro del Parque Nacional Abel Tasman y toma de 3 a 5 días en ser completado. Mientras que la caminata completa tan solo requiere de un nivel moderado de condición física, muchos escogen recorrerlo por partes, ya sea por un día o tan solo una hora o dos, una opción fácil dado el hecho de que existen taxis acuáticos que proveen servicios de un punto a otro. Pero si está tentado a hacer el recorrido completo, de verdad vale la pena su tiempo. El recorrer los sinuosos senderos en el bosque nativos para emerger una y otra vez en hermosas playas apartadas, y subir ocasionalmente a las crestas de las montañas desde donde puede ver el mar burbujeante, harán de estos días unos que no podrá olvidar.
 
Por supuesto, ninguna descripción de Nelson estaría completa si no mencionamos las bodegas. Mientras que Marlborough se enorgullece por su sauvignon blanc, Nelson ofrece un excelente pinot noir, chardonnay y aromáticos. El riesling "Sweet Agnes", de la Seifried Estate Winery, el cual ha ganado medallas de oro por todo el mundo, debe ser probado para poder creerlo, y este es tan solo la punta de un delicioso iceberg cuando hablamos de los vinos de Nelson.
 
Para disfrutar algunas de las mejores playas de Nueva Zelanda, no necesita buscar otra además de Golden Bay. Es un camino de dos horas por la costa, pero cada minuto valdrá la pena cuando alcance las arenas limpísimas de esta remota bahía. Este es el lugar al que muchos residentes de Nelson van durante sus vacaciones, un indicador justo de lo especial que es este lugar. También se encuentra en la frontera con la entrada norte del recorrido costero de Abel Tasman, ¡por lo que puede usarlo como un punto de inicio del recorrido!
 
 
Desde las brillantes luces y las brisas del puerto de la ciudad de Auckland, hasta las playas remotas y los matorrales de la región de Nelson, este viaje le dejará toda una carga de recuerdos y el deseo de volver a recorrer las carreteras de Nueva Zelanda. Y a pesar de que es posible realizar este recorrido en 5 días, este breve itinerario le ha mostrado que la ruta tiene mucho más para usted de lo que podría explorar en todo un mes de viaje. Recuerde recibir con los brazos abiertos a las sorpresas a lo largo del camino, disfrutar la jornada y contarle a los demás para que ellos también puedan experimentar los secretos que Nueva Zelanda les puede ofrecer.